
Abajo
Corre la voz,
Se encalla
Con las aspas
Del barco tardío
Llanura febril,
Encriptadas las palabras
Sueltan un himno
Pecador.
Los demonios
Se hacen humo
Y los fuegos
Señalan
Lo que ya
No será
Hay rumor de guerra
En las almas
Hay alaridos deseperados
En las cárceles previsibles
Es momento
De girar
Y ver.
poema: SERGIO L. CIRIGLIANO
imágen : M.C. ESCHER